Los fanáticos de los autos somos, aunque no nos guste, una suerte de nerds de la velocidad. Hablamos nuestro propio idioma, nos juntamos entre nuestros pares, usamos una terminología incomprensible para el común de los mortales, destinamos cada centavo que podemos al auto de turno y gozamos de una incomprensión que, en el fondo, nos hace felices.
Las convocatorias a los piques legales cada vez son más comunes y el nivel mejora cada año.Empezamos el año con todo al Sur de Lima, este Sábado 25 de enero PIQUES LEGALES en el Autodromo La Chutana (Km... http://t.co/XyonPjEaHH— Speed Peru Store (@SpeedPeruStore) 11 de enero de 2014
Teniendo en cuenta que un fierrero que se respete de serlo, jamás deja de buscar lo mejor para su auto y ahora -suerte de todos- los talleres cada vez trabajan con mayor profesionalismo, los resultados son cada vez mejores y vemos, mas seguido que antes, maquinas muy bien armadas; los responsables son muchos y aquí hemos querido dar algunos datos de talleres que se ajustan al dinero o lo que se quiera hacer primero.
Autodromo La Chutana (San Bartolo), el perfecto lugar para dar rienda suelta al pedal. El mejor aporte al automovilismo local.
Desde la instalación de admisiones o escapes, forjado de motores, configuración o restauración, la idea es que el fanático elija qué quiere, pues las prioridades cambian con las modificaciones. Por ejemplo, un sistema de escape es lo primero que se modifica en un auto estándar, mientras que en uno que haya sido modificado en su rendimiento o potencia, el escape es una de las últimas que se le instala.
Del mismo modo, si lo que se quiere es iniciar una preparación muy especializada, opciones entre las que están consagrados automovilstas nacionales nos dan la posibilidad de acercarnos a un grado mucho más profesional e igualmente extremo del mundo de los fierros.
Andy Ledgard, especialista en configuración de ECUs (computadoras), siempre vendiendo a muy buen precio repuestos y conocimiento
Es importante saber que los carros son una diversión tan cara como peligrosa, especialmente para los que nos rodean; lo importante es que entendamos que es mejor correr en un autódromo que en la calle y así poder disfrutar de todo el tiempo, dinero e ilusión invertidos en ese amasijo de lata que tanto nos encandila.